martes, 2 de septiembre de 2014

PROPÓSITO EN LA VIDA



Mírate al espejo y ve lo que Dios ha hecho. Te ha FORMADO como eres HOY, con propósito. Has vivido lo que has vivido, hasta hoy, con propósito. Todas las experiencias, las tristezas, las desilusiones, el dolor, las decisiones... Te han hecho lo que ahora eres. Y eso es lo que te define. No lo niegues. No lo sufras. No lo cargues cómo sí fuera negativo. Direcciona todo eso para visionar tú futuro. Dios te hizo hermosa, auténtica, sensible a las necesidades de otros; sólo tú que has vivido esas experiencias puedes comprender a quienes pasan lo mismo o aún peores situaciones pero no tienen esperanza.

Pregúntate sinceramente y responde verdaderamente:

1.- ¿Qué es lo que quieres en la vida?

Qué es lo que realmente deseas en esta vida; (Ejemplo yo: sí me preguntas; lo que yo quiero es impactar a inspirar la vida de miles y lo haré a través de los medios... Seré conocida y mi voz será escuchada y mi testimonio y estilo de vida será visto y seguido por muchos.) Ese algo que quieres es general, pero es grande a la vez, abarca todo, es lo que te moverá y es parte de un todo. Para muchos es el dinero y hacen todo para conseguirlo. Pero eso que quieres debe ser más que algo simplemente perecedero. Y debe ser un fin real, no un medio. El dinero es un medio para muchas cosas pero muchas personas equivocadamente ponen el dinero cómo un fin.

2.- ¿Qué es lo que te gusta hacer, eso que disfrutas a plenitud y te sientes completa cuándo lo realizas?

Hay algo que tú harías aunque no te pagaran con el mayor gusto. Algo en lo que pones todo de vos para hacerlo bien y lo haces con placer y contenta. Eso que haces o quieres hacer siempre. Esa es una buena señal. (Por ejemplo yo: amo comunicar. En todas las áreas. Sea en radio, tv, escribiendo, a una sola persona o a miles... Quiero decir algo que valga la pena escuchar y sé que puedo. Yo he sido impactada así y sé que lo puedo hacer con muchas personas. Amo comunicar. Cuándo lo hago soy feliz, plena y quiero seguir aprendiendo de la mejor manera y creciendo) ¿ves? Es algo que te mueve a hacerlo.

3.- ¿Cuáles son tus talentos, habilidades y aptitudes?

Esto es vital que lo reconozcas y lo uses, lo desarrolles, te entrenes, lo perfecciones, te prepares en base a eso. Es cómo el material propio que Dios te da.

- Talento.- es algo natural con lo cual has nacido, la facilidad de hacer algo y hacerlo bien. Capacidad de hacer algo. Sí o sí todos tenemos por lo menos un talento. Descubre cuál es y utilízalo. Perfecciónalo.

- Habilidades.- Seguro que tienes que esa facilidad para hacer una o varias cosas puede ser natural o adquirida.

- Aptitudes.- Es adquirido a través del estudio o preparación que te hace apto para hacer algo.

4.- Tus antecedentes.-

Es lo que has vivido, aprendido y aprehendido. La formación que has recibido por tus experiencias. Esto e único porque es tú historia y es tú manera de ver las cosas. El impacto que hizo en tú vida. Positivo o negativo. Ese es tú capital. Es tú material para arrancar. (Ejemplo: alguien he fue violada. O bien se amarga por el resto de su vida, reacción negativa, y odia a su hijo o hija; o bien crea una fundación para ayudar a mujeres en su misma situación, o tal vez se prepara cómo psicóloga para ayudar, reacción positiva)


Lo que has vivido todo está en control de Dios y es con propósito. Pero no es para destruirte sino para formar el carácter que Dios necesita para grandes cosas. Muchas más que las peores circunstancias que viviste. Todo esto hace surgir anhelos en tú corazón; en lo más profundo, algo que quizá sólo vos conoces. Anhelo de justicia, de ayudar, de inspirar... Todo esto. Te direcciona para que visiones tú propósito en la toda. Y obvio la comunión con Dios es fundamental. Él te guía desde las pequeñas cosas hasta las decisiones más grandes. Sólo en el encuestas tú propósito. Y más aún lo cumples. Y eres plena antes, durante y después. 

Enfócate en tú propósito y deja de perder tiempo en pequeñeces, en depresiones, tristezas... Incluso en personas que te desvían y desenfocan… Dedícate con pasión. Con todas tus fuerzas a luchar por ello. ¿Parece imposible? Haz tú parte hasta lo último que puedas, Dios hace lo imposible.

Recuerda: Tal vez no puedas cambiar todo el mundo, pero si la parte que te rodea…. Impacta al mundo, haz la diferencia.