jueves, 16 de junio de 2016

Haz precisamente eso que te asusta



Has lo que te asusta,
Desafía tus miedos, rompe tus propios esquemas impuestos por otros o autoimpuestos, por experiencias pasadas o por miedo.

Sino qué sentido tiene vivir, si siempre harás aquello que te hace sentir cómodo y seguro, aquello para lo que eres bueno, aquello que de tanto repetirlo se convirtió en una rutina, en algo automático y obviamente en algo que siempre te da los resultados esperados, los cuales ya das por sentado.

Intenta algo nuevo constantemente, algo para lo que definitivamente no eres bueno, que requiera esfuerzo extra para hacerlo, que implique desarrollar nuevas aptitudes  y  te exija adaptación.

El miedo siempre estará, así que con él o sin él hazlo.

Prueba nuevas y desconocidas experiencias por el simple hecho de emocionarte con toda la intensidad que requiere, de explorar nuevas sensaciones que te hagan llorar, reír, gritar, asustarte, cerrar los ojos, suspirar; que nada te quite la capacidad de sorprenderte y asombrarte de las cosas simples y de las cosas extraordinarias.

Lánzate a hacer cosas sin planificar, y deja que el camino te sorprenda, no necesitas tener el control de todo, menos de los resultados, déjate guiar por el corazón.

No sabrás si eres capaz hasta que al menos lo intentes, no sabes si tienes lo que se necesita hasta que te pongas a prueba, no crecerás a menos que rompas los moldes.
Así que sal de tu comodidad y genera tú mismo los cambios que tanto te asustan, lo peor que puede pasar es que madures más, que crezcas como persona y que aprendas nuevas cosas.

Si no sabes qué hacer con tu vida, una buena manera de comenzar es hacer lo que te asusta. Habla en público y conviértete contra todo pronóstico en el alma de la fiesta, toma ese curso de baile, para lo que eres pésimo, haz ese viaje que tanto quieres y deja de esperar que alguien te acompañe, ve y salta en paracaídas, deja esa carrera que estás estudiando y que detestas, rompe esa relación con la que no estás conforme y sólo estás por costumbre, anímate a decirle a esa persona que quieres estar a su lado, deja ese trabajo que tanto te frustra, empieza ese negocio que quieres y aún no te animas arriesgar, escribe ese libro, ve por tus sueños.

Deja de esperar el momento correcto para todo, no esperes que el miedo se vaya, no esperes que alguien te acompañe o te anime, o te de la respuesta, la respuesta está dentro de ti. Toma el riesgo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario