La sociedad está formando hombres y mujeres
sin dominio propio. Ha creado tantos sistemas prediseñados, que desde que
nacemos, somos introducidos a sistemas que nos van condicionando el
comportamiento, nos dice qué hacer y cómo hacer. Por ejemplo, el sistema
educativo, te direcciona el pensamiento, te dice qué aprender y cómo aprender;
en fin, mientras no nos ajustamos a un sistema se nos hace difícil tomar
nuestras propias decisiones, mientras no cumplimos horarios impuestos por algún
sistema, se nos hace difícil ser puntuales; en muchos casos, nuestra disciplina
depende de eso, entonces se nos hace difícil formar carácter capaz de ejercer
dominio propio fuera de un sistema, llámese empresa, institución educativa,
iglesia, club, etc.
El verdadero carácter se forma cuando la disciplina y la determinación de hacer algo dependen enteramente de nuestra decisión; y no de cuanta nota voy a conseguir, o cuanto de dinero voy a ganar… Si aprendemos a formar un carácter con dominio propio, sabremos decir no, a lo que no es bueno para nosotros, sabremos establecer prioridades, sabiendo que para lograr lo que nos proponemos tendremos que adquirir hábitos que nos lleven a ello y que sólo depende de nosotros.Claro, es fácil hacer las cosas, cuando nos dicen cómo hacerlas y nuestras decisiones se basan en castigo o recompensa, si me esfuerzo, gano si no, pierdo.
Si hasta hoy, no ha ejercido el dominio
propio, que todos tenemos, pero que hay que desarrollarlo, comience a hacerlo,
forme un carácter capaz de enfrentar o vencer cualquier circunstancia, porque
cuando tomamos decisiones que dependen únicamente de nosotros para cumplirlas,
como tener una dieta saludable, , orar, leer la biblia, leer un libro; y las
cumplimos por respeto a nosotros mismos, estamos desarrollando un carácter
indestructible y es cuando comenzamos a
gobernar con nuestro interior todo lo
que nos rodea, comenzando por nosotros mismos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario